sábado, 19 de julio de 2014

Funny Pets - Abandono materno, la serie.

Una luna y una señora con grandes pechos. Su caracterización es idéntica.
Si buscáis diversión y mascotas, habéis llegado al sitio equivocado.
Funny Pets
12 episodios.

6 min/episodio.
Comedia.
Producido por: KBS
Un día, un ejército de objetos voladores no identificados (OVNI) apareció de la nada bajo la luna llena, y uno de ellos cayó por error a la Tierra. Los dos extraterrestres, Media Luna y Corona, que estaban a bordo del OVNI caído, pasaron a ser recogidos por una niña de la Tierra, Funny. En realidad, Media Luna y Corona se vieron obligados a vivir como mascotas de esa chica egoísta y caprichosa...


No tengo la menor idea de qué es esto. No tiene trama, no es una serie para niños, no es una serie para adultos, no es graciosa, y no tiene mascotas, salvo que puedas considerar un sol y una luna mascotas. No se, hay quien tiene boas.
Haremos un repaso por encima de algunos de los capítulos, sin miedo a saltarnos algún detalle importante de trama, puesto que Tenkuu Danzato Skelter Heaven tenía una trama más compleja que esto, y aquí ni siquiera hay calamares gigantes.

¿Preparados para lanzarnos a un mundo de pistolas-pato, cuerpos celestes antropomórficos y pechos que desafían toda ley física?
Es la mejor forma de venderlo que se me ha ocurrido.
DAAAAAAAAAH
¡DAAAAAAAAAH!

Capítulo 1 - Candy

Un plano fijo de diez segundos de una casa mientras suena música que podría provenir de un juego de SNES nos da la bienvenida a este mundo de dolor y traumas, antes de llevarnos al opening, en el que podemos ver a la luna escupiendo OVNIS (¡Así que ahí es donde estaban! Aprende, NASA), y tal como nos prometía la sinopsis, uno de ellos se estrella contra la Tierra y más concretamente contra nuestra pantalla mientras unos niños gritan el nombre de la serie como si les fuese la vida en ello.

Pasamos al interior de la casa, donde una señora se come eróticamente una especie de chupachups casero mientras el extraterrestre con forma de sol, al que llamaremos Sol, y el extraterrestre con forma de luna, al que llamaremos Luna (¿Bien? ¿Captáis los matices?) le dibujan. Diréis lo que queráis pero a mi esto cada vez me parece menos para niños.
Hay gente que ha ido a la cárcel por menos.
Hay gente que ha ido a la cárcel por menos.

Sol ha hecho un bonito dibujo y es recompensado con una piruleta, mientras que Luna, que ha hecho algo más estilo Picasso, es tirado fuera de la casa. Niños: no os esforcéis en hacer nada, porque si alguien lo hace mejor que vosotros, mamá os echará a la calle.
Exiliado, Luna se pone a reír con la voz más absolutamente creepy que he oído yo en mi vida, una especie de oso Yogui drogado, y suelta una lágrima, en la cual se reúnen hormigas cuando esta cae al suelo, por alguna razón. ¿Son los extraterrestres dulces y necesitan piruletas para vivir? ¿Es una extraña raza de hormigas que se alimentan de sufrimiento?

No nos lo van a explicar, y tampoco nos importa, porque en la siguiente escena Luna mata las hormigas con un pato que dispara rayos láser.
Ojalá me lo estuviese inventando.
Ojalá me lo estuviese inventando.
Saltamos a la noche, donde Luna intenta robarle a Sol su querido chupachups, que de alguna forma le ha durado todo el día, y cuando es descubierto, lleva a cabo la maniobra de distracción más rara que he visto yo jamás. Ruego al querido público que preste atención al siguiente vídeo.
¿No es maravilloso? La animación ortopédica, la voz sacada de los delirios del borracho del pueblo, la absoluta falta de coherencia en la escena y en el universo en general. Este instante es el que hace que el resto del capítulo merezca la pena.

Saltamos fuera una vez más, donde Luna vuelve a quemar hormigas, ahora usando un visor y todo para localizarlas, mientras Sol le observa desde la puerta, triste porque la falta de chupachups ha convertido a su amigo en un sociópata bailarín, y decide compensar llevándole un caldero de caramelo para que se haga su propio chupachups y sea feliz.
Pero llega tarde, puesto que su colega ya ha caído del todo en las garras de la demencia y ha prendido fuego al jardín con su pato. En un pequeño momento de fe, Luna se da cuenta de la existencia del caldero, se hace su propio chupachups y parece que todo va a acabar bien, con una moraleja sobre el poder de la amistad... pero, en un cruel giro de trama, tropieza y el caramelo le cae encima.

¿Y como acaba nuestro querido amigo, que lo único malo que ha hecho es no saber dibujar?
Karma.
Karma.

Ajá. Quemado vivo, sin poder huir y viendo como hormigas le recorren el cuerpo, probablemente con intención de comérselo. ¡Para niños! La cosa mejora, y tenemos cosas como el capítulo 2, cuando Luna mata a Sol de un flechazo en la cabeza, y a su vez es asesinado por la señora del pecho raro, que le clava una flecha en el ano (si) cuando intenta montarse en una flecha (yep) para perseguir a unos topos voladores (exacto), el capítulo 4, en el que Sol demuestra propiedades aspiratorias a lo Kirby y Luna lo mata para que deje de comer (luna que acaba con la cabeza partida por la mitad), o el 5, en el que Luna muere y nadie se da cuenta mientras su fantasma deambula por la casa cada vez más histérico.
¿A que niño no le gusta la idea de morir y que su madre no se de cuenta?
¿A qué niño no le gusta la idea de morir y que su madre no se de cuenta?

El nivel va in crescendo en toda la serie, con continuos chistes sexuales (ji ji, se le ha metido un pez por el culo), y, sobre todo, muestras de abandono por parte de la señora, ya no solo porque la mitad de las "tramas" se inician porque tienen hambre y ella no les hace caso, si no porque llega a un punto en el que Luna trata de suicidarse, primer acto violento de la serie en el que hay incluso sangre, y ella pasa de largo.

Quedan para el recuerdo tramas maravillosas como un arco iris maligno persiguiendo a nuestros protas, que acaba con Luna sacándose los ojos, o Sol matando a Luna a martillazos (una vez más, con sangre por todas partes) para que este se convierta en un ángel, o Luna quedando atrapado dentro de un horno y acabando siendo convertido en el pastel de cumpleaños de la señora. Tramas divertidas y originales en las que todo el mundo se lo pasa bien, el poder de la amistad triunfa, y no enseña a tus hijos que si mamá le hace más caso a tu hermano que a ti, lo que tienes que hacer es matarlo de un cañonazo.
Yo tenía la misma cara mientras veía esta serie.
Yo tenía la misma cara mientras veía esta serie.
Afortunadamente, la serie solo dura 12 capítulos, y son realmente cortos, restando el plano de 15 segundos de una casa, el minuto de opening y el minuto de ending, quedan apenas cuatro minutos de dolor. Dolor que gracias a los cielos ya se ha acabado y no tendremos que volver a sufrir jamás...

Mañana, aquí, "Mars of Destruction". Por mala que sea, en comparación, nos encantará.
¿To be continued?
¿Continuará?

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